Seguidores

domingo, 24 de julio de 2016

"LAS SOMBRAS EN LA PARED" (14º parte) de Adriana Gutiérrez





Sé como se siente y lo sostengo y lo tapo al mismo tiempo; al no ver el muro recobra en parte sus movimientos.
"Escuche -le digo- yo me voy a acercar caminando para
atrás ¿quiere seguir mirando?"  A duras penas asiente, así que lo
dejo sentado y lentamente me corro a un lado, al estar de nuevo
ante sus ojos la maldita pared, y no tener apoyo, Héctor casi
no puede sostenerse. Tomo la brocha y voy hacia el muro, miro
de reojo y veo que estoy cerca; dos pasos más y, tomando fuerza
tiro la brocha contra la pared.
Ocurre lo mismo que antes: el estruendo y el golpe me tiran cerca de Héctor que se desmayó y está muy pálido.
Yo estoy conciente y no tan débil como él, así que lo saco afuera y lo dejo acostado en el pórtico, con cautela miro al muro pero
las sombras ya no están; debió ser más impresionante para
Héctor porque las siluetas se destacarían más nítidamente
sobre la pared casi limpia.
Me arrodillo junto a él, le masajeo las manos y le doy
pequeños golpecitos en la cara, se está recuperando, lentamente
vuelve en sí.
"No hable, Héctor, no trate de hablar y menos de levantarse, después le prepararé un café bien cargado ¿fue bravo, no?"
Me hace señas de que sí.
Cuando estábamos en la cocina, tomando café, sentados en
dos cajones, trabajosamente, dice: "mañana traeré una filmadora, a ver si lo convencemos de voltear ese muro", sé a quién se
refiere y le digo que tiene mucha razón, que esa pared es
peligrosa para la familia del ricacho.
"Haremos una copia para el caso de que él se niegue, Juan -me decía durante el regreso- ¡imagínese!, él debe saber qué pasó, a mi no me interesa la historia ¡pero esa pared del averno se tiene que ir!, suponga que las sombras se superpongan al tapiz, y que su mujer vea eso; además están los chicos, tienen unos cuantos
nietos de su hija mayor, que seguramente vendrán a pasear. No, si él no entra en razón recurriremos a las autoridades ¡no sé a cuáles, pero algo haremos!"
Yo me quedo en silencio, pensando; después, despacio, le digo:
"si es que esas cosas salen en la película..."
Salieron.

No hay comentarios.:

Publicar un comentario