Fragmento de la
precuela de
Rambo, contada
por la que fuera
su mujer, Roberta
Adams, quien
lo conoció cuando
ámbos tenían
siete años.
(Pág. 66)
... Cora nada con sus últimas fuerzas hasta unas rocas
planas donde el terreno sube provocando una
pequeña caída de agua; Cora mete la cabeza
a travez de ella, la abertura es estrecha.
Cora: "Ahora falta que yo no pase..."
Pero pasa, sosteniendo a Robie por una mano
para que no se hunda, entra arrastrando a Robie
hacia el interior del refugio; rápidamente le quita
la ropa mojada, venda la herida y le aplica
antibiótico, cicatrizante y analgésico, de los que hay una
farmacia, luego la masajea y cubre con frazadas.
Autora Adriana Gutiérrez Publicado en 2005 www.librosenred.com Amazon.com y Barnes & Noble |
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